Comienza
el Año 2014 y a todos os deseamos que transcurra cargado de Esperanza Nueva y
renovado empeño misionero.
Nos
unimos al Papa Francisco que, en su discurso del Nuevo Año ha hecho una apasionada
llamada en favor de la Paz, y os deseamos a todos la Paz del corazón, fuente de
alegría y compromiso para un auténtico trabajo evangelizador que nos ayude a
construir la Paz que Jesús “el Príncipe de la Paz” vino a traer a la tierra. Ojalá
se haga realidad para cada hombre y mujer de nuestro mundo, y que todos podamos
ver el fin de tanta guerra, violencia e injusticia.
Es
nuestro gran deseo para cada uno y para todos.